Cuando las noticias sacuden a tu alma,
puedes ver cual frágil e insignificante somos ante el dolor y la pena.
La impotencia de no poder resolver lo que queremos,
nos da la total inmensidad del poder de DIOS,
lo incierto se vuelve claro ante nuestros ojos,
y vemos que solo estamos de paso,
que nunca una mesa de navidad congrega a los mismos afectos
y aunque el sol siempre se ponga en cada atardecer los colores del cielo son diferentes.
Así es la vida y su paleta de colores, el gris y el negro son partes de ella.
El dolor es parte activa de la vida cuando esta se presenta indolente demostrando que el aprendizaje se vuelve desleal...
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